Modelos de Negocios: ¿Qué? ¿Por qué? y ¿Para qué?
La definición conceptual de la naturaleza del negocio, cuáles son los motores sobre los cuales se van a desarrollar los ingresos, características y propiedades que tendrán nuestros productos, y a partir de cómo llegamos a obtener la información de estos productos las propiedades y ventajas competitivas que deben de tener los productos para su éxito, de manera estructurada y bajo una metodología que acompañamos al cliente llegamos tener el panorama que le va significar la posibilidad de tomar mejores decisiones y poder programar de manera racional y bajo un esquema sólido un programa de trabajo.
El modelo de negocio no concluye si en la parte de los costos no se incluyen la rentabilidad de los proyectos, la tasa de retorno a partir de la proyección esperada en ventas, ingreso y utilidades permiten tener claridad de la conveniencia de tomar el riesgo o incluso de la posibilidad de buscar aliados estratégicos para que aporten capital al proyecto. Un modelo de negocio será la herramienta que ese socio estará esperando al ser invitado a la sociedad, la construcción de estos escenarios es un proceso de acompañamiento, el cual ponemos a su amable consideración para que nos permita ser aliados en este proceso que permitirá conectarlo con empresas e inversionistas adecuados, que podrán en caso necesario darle un impulso a su proyecto.
Los modelos de negocio se construyen de un proyecto en gestación, o en un proyecto en proceso que requiere de formalizar su concepto para los fines que aquí se comentan.
Un modelo de negocio atrae capital a tu proyecto e identifica de manera clara cuáles son tus fuentes de ingreso y cómo impactan a tus utilidades, definir qué tan rentable es el proyecto y qué estrategias de producto hay que llevar a cabo para que tu proyecto sea presentado a tus posibles socios y hacia adentro de tu propia empresa.
Indispensable cuando el proyecto está a nivel de idea, con apenas pequeños y reducidos esquemas, antes de la operación del mercado, el poder contar con una estructura metodológica que permite definir factores claves que van sobre el producto, su factor de propuesta de valor clave, sus temores medidos que deberán de tener una clara definición y respuesta a partir del análisis de las fuerzas del mercado,
De lo que aquí se perfile, en una metodología de acompañamiento o consultoría de gestión con el cliente, dependerá la confección y diseño que deberá tener el producto y el rumbo que deberá seguir nuestro proyecto, la experiencia que se obtiene es que en buena medida los resultados al inicio son muy diferentes a los obtenidos al final del ejercicio, esto tiene que ver con la ampliación del horizonte para nuestro proyecto.
Los elementos del modelo de negocio no solo nos sirven para establecer la hoja de ruta de nuestro proyecto sino también le permiten convertirlo en una herramienta de atracción de recursos, el cual en nuestra red de contactos y aliados estratégicos lo podemos poner a su consideración de manera opcional.
Por lo tanto, construir un modelo de negocio para un proyecto de start up cuando se ha desarrollado una idea por primera vez, en un primer proyecto, conocer bajo qué términos resulta más rentable resulta vital, mediante BMP, te acompañamos desde tu idea hasta que estés en condiciones de implementarla.
El desarrollo de nuevos productos y servicios sin saber qué producto, solo sabes que hay que hacer un cambio empresarial, esto es lo que necesitas, representa un fuerte potencial para hacer crecer tu empresa, cuando observas que tus ventas declinan o no crecen como esperas, acompañar en ese proceso de agregar a nuestra línea de producto o servicios un nuevo concepto en el mercado, que vaya de acuerdo al potencial de la empresa, aplicar las técnicas para el desarrollo de las oportunidades de negocio que le den sinergia, requieren de un programa de trabajo, bajo una metodología que dan las nuevas herramientas del conocimiento.
El concepto de disrupción parte de un cambio, de un reinvento de nuestro mercado y de nuestro producto, no es una evolución o diferenciación de nuestro producto como sí lo es la innovación, el proceso disruptivo es más drástico, quizás más agresivo pero a veces se hace necesario, más de acuerdo a las características propias de tu empresa y del mercado.
La disyuntiva entre seguir un proceso de disrupción, cambio de 360 grados y la de un proceso de innovación que va más hacia la evolución o diferenciación de nuestro producto o mercado a través de una respuesta a la modernidad, esa interrogante del rumbo a seguir no depende de nuestro sentir o querer, sino principalmente de un diagnóstico de nuestra posición en el mercado.
El entorno del mercado por los drásticos cambios en los hábitos, consecuencia de la pandemia del 2020 ha modificado de una vez por todas y para quedarse la cultura y la sociedad, esto ha modificado las interacciones comerciales y ha alterado los hábitos de compra, las marcas líderes, en general es un cambio de 360 grados en los negocios.
Alinearnos con esta nueva realidad requiere de decisiones estratégicas, vencer la resistencia al cambio y aceptar nuevas formas de trabajar y de revisar la visión y misión de nuestra razón de ser como empresarios, en esta nueva realidad, se requiere reinventarse, para eso los cambios pueden llevarnos a procesos disruptivos de nuestros productos, algunos saldrán y otros llegarán, el proceso de definición de selección es un proceso que hay que alinear al mercado y a los clientes, hacia el cliente que tradicionalmente hemos tenido, estudiar sus cambios, y también hacia nuevos mercados.
El proceso de reconversión representa un fuerte potencial para hacer crecer tu empresa, cuando observas que tus ventas declinan o no crecen como esperas, acompañar en ese proceso de agregar a nuestra línea de producto o servicios un nuevo concepto en el mercado, que vaya de acuerdo al potencial de la empresa, aplicar las técnicas para el desarrollo de las oportunidades de negocio que le den sinergia requieren de un programa de trabajo, bajo una metodología que nos dan las nuevas herramientas del conocimiento.
La disciplina que conlleva el proceso de innovación de nuestros productos, ya sea de uno de ellos o de nuestra gama de productos o servicios, pasa necesariamente por una gama estructura metodológica que le dé formalidad para poder llevar con éxito y acompañarlo para que sea un éxito.
La innovación puede ser de dos tipos, de forma o de fondo, de forma en la imagen, empaque, gramaje, tamaño, presentación, etc., o bien de fondo, características organolépticas, de nuevos atributos de nueva funcionalidad, de cambios en la formulación esto va tener consecuencias en que puede desalinearse el mercado al cual va dirigido o bien puede crear una demanda nueva hacia un nuevo mercado, el reconocer hacia dónde se deben de dirigir estos cambios es un proceso intrínseco o extrínseco.
Intrínseco porque la modificación y evolución del producto la hacemos de un proceso desde adentro hacia afuera del mercado, con lo que la respuesta del mercado nos dirá el nuevo mercado al que nos conviene llegar, o bien un proceso extrínseco, donde las necesidades del mercado, de afuera hacia adentro, nos dirán qué innovaciones o transformaciones deberán realizarse hacia adentro de la empresa, con reingeniería del producto.
Este proceso debe conducirse de manera profesional, dónde innovar, qué cambiar y modificar en tus productos, servicios a ser adaptados, tu metodología requiere de un programa alineado al mercado, nuestra experiencia en identificar negocios exitosos a la largo de 25 años. Con la amalgama de las nuevas técnicas de información del mercado en vanguardia digital representan una ventaja competitiva en los nuevos ángulos de la información del mercado, para una vez concluido poder apoyar su desarrollo acercando a posibles aliados estratégicos, como posibles socios.
Hoy en día el rol de la tecnología en la vida productiva resulta factor ya no opcional sino requisito indispensable para poder operar de manera satisfactoria, las plataformas de información la tecnología resultan en un canal de comercialización por sí solo, redefine las fuerzas del mercado, sin embargo el proyecto de tecnología no debe de ir desconectado del mercado al cual va atender, una idea genial no garantiza el éxito, necesita gestarse alineado a las necesidades del mercado, contar con una propuesta de valor que le resulte atractiva al mercado y le sea viable.
En esta metodología se revisa la viabilidad del proyecto tecnológico, y de cómo se debe de alinear al mercado, identificar su posición competitiva frente a un entorno en franco crecimiento y qué respuesta viene a darnos.
Los proyectos de tecnología representan un fuerte potencial de desarrollo empresarial, el cual puede ir dirigido a un proceso intermedio en la cadena de valor industrial o de procesos, el cliente es la industria y como tal representa un gran reto pero al mismo tiempo una gran oportunidad para atraer mercado en gran escala, hacer el proceso de manera adecuada representa el éxito, lo contrario es una oportunidad que se pierde y no regresa.
La tecnología tiene un sinnúmero de aristas y ángulos de análisis, puede ser desde una plataforma de e-commerce hasta la construcción de un proyecto de inteligencia artificial para llegar al internet, la construcción de una app, etc. Dado que es una industria de desarrollo temprano, las curvas de crecimiento que se pueden alcanzar son excelentes, pero así mismo si los proyectos no tienen una respuesta y razón de ser, no vienen a resolver, su potencial se revierte, los pasos hay que darlos con formalidad, y en esta metodología se obtiene la respuesta para que nuestro cliente la lleve a cabo.